martes, 6 de octubre de 2015

ESCALA DE VALORACION PSICOLOGICA PARA NIÑOS/AS

ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE PASTO
ESCALA DE VALORACIÓN CUALITATIVA DEL DESARROLLO INFANTÍL
Fuente: I C B F
DOCUMENTO DE ESTUDIO PSICOLOGIA DEL DESARROLLO II

PRESENTACIÓN

La Escala Cualitativa del Desarrollo Infantil es un instrumento diseñado para evaluar el nivel de desarrollo psicológico del niño menor de seis años. Valora sus actividades espontáneas y naturales cuando esta con otros niños o con adultos en su diario vivir.  Sirve para sistematizar e interpretar información, para reorientar las relaciones y prácticas de socialización en el medio familiar a través del trabajo con los padres y para planear las acciones pedagógicas con grupos de niños.

La escala, al igual que la conceptualización sobre el desarrollo psicológico de la cual se derivo[1], fue construida para dar respuesta a las exigencias prácticas, orientando y llenando de sentido las interacciones que los adultos tienen con los niños.  Se constituyen en elemento fundamental para impulsar la construcción de nuevas formas de relación con el niño en todos los espacios de la vida social, incidiendo en los procesos de crianza y educación, de tal forma que se creen las condiciones para que sea posible el despliegue de la vida infantil y el desarrollo psicológico del niño.

Como el desarrollo psicológico del niño depende de la calidad de las relaciones que le ofrecen los adultos responsables de su crianza y educación, se requiere generar un verdadero ambiente de bienestar no sólo hacia los pequeños sino también entre los adultos, de manera que existan formas de relación y comunicación basadas en el respeto y el reconocimiento de los otros como personas.
Se trata de un proceso de transformación cultural que busca devolver a la infancia, la importancia que ésta parece haber perdido y a los adultos y a la sociedad en su conjunto, la responsabilidad que tiene sobre ella. Ello implica la incorporación de nuevas prácticas y transformación del sentido de lo que se hace con el niño.

El adulto que comprenda su papel en la conformación del psiquismo del niño y en su evolución, dará un significado especial a sus interacciones con él.
Al realizar una revisión sistemática de los instrumentos psicométricos clásicos y más conocidas para evaluar el desarrollo infantil (Gesell, 1920, Brunet y Lezine,1951, Bayley, 1969, Griffiths, 1954), se observa que los autores tiene en cuenta cuatro áreas diferenciadas: motricidad gruesa, motricidad fina, lenguaje y personal social.
La conceptualización del desarrollo construida desde el ICBF hace énfasis, por el contrario, en un modelo explicativo integrador de los procesos psicológicos. Se considera que en los contextos naturales de interacción, los compartimientos expresan un funcionamiento psicológico organizado en el cual se integran los componentes motores, cognoscitivo – representativos, afectivos y sociales.
Este funcionamiento psicológico estructurado se manifiesta en la forma como el niño se aproxima e interactúa con la realidad en cada una de las etapas del desarrollo, así como en la génesis misma de los procesos en la cual se hace evidente una interdependencia mutua entre ellos[2]. Lo anterior no significa que todos los procesos psicológicos se desarrollen de manera completamente simultánea; por el contrario se observa asincronía y ritmos diferentes de desarrollo en los diversos procesos y en los distintos niños.
Así mismo, diversos autores (Zazzo 1975, Gibello 1984) plantean que cuando se dan trastornos o perturbaciones en el desarrollo, la totalidad del funcionamiento psicológico se ve alterada, aunque se exprese de manera más notoria en un proceso específico.
De otra parte, la conceptualización del desarrollo del ICBF, se ubica dentro del planteamiento de modelos interaccionistas del desarrollo (Piaget, Bruner,Vygotsky), no solo respecto a la articulación de los factores determinantes, sino también en relación con la constitución de los procesos, dándole énfasis a los procesos socioculturales dentro de los cuales se desarrollan los niños.

El desarrollo infantil
Nuestra concepción del desarrollo infantil parte de reconocer que los procesos subjetivos o psicológicos, aunque diferentes, son indisociables del contexto sociocultural en el cual surge. Lo psíquico sólo es posible al interior de la cultura y gracias a la aprobación o interiorización de símbolos e instrumentos.
Por ello, para comprender el nivel de desarrollo alcanzado por un niño, se requiere tener en consideración el contexto de socialización y en particular la calidad de las relaciones que le ofrecen los adultos responsables de su cuidado y educación. Como veremos más adelante, esta consideración nos llevará a tener en cuenta los datos del contexto socio familiar del niño en el momento de interpretar la información obtenida con la escala.
El desarrollo psicológico es un proceso complejo e integral en el cual pueden diferenciarse algunas dimensiones y fases interdependientes; la diferenciación es posible si se considera que el psiquismo se construye progresivamente, al actuar sobre la realidad y diferenciar en ella el mundo interno y el mundo externo y en este último lo social y lo natural.
Esta CONSTRUCCION PROGRESIVA; da lugar a una secuencia ordenada; donde pueden reconocerse grandes cambios cualitativos que afectan la totalidad del desarrollo dando lugar a ETAPAS.  Por ello el instrumento diseñado está organizado por etapas, con lo cual se busca dar cuenta de la COM-PLEJIZACION propia del desarrollo. La referencia a la edad cronológica, aunque es importante, no es el criterio esencial.
Dentro del proceso de desarrollo hemos diferenciado cuatro etapas: PRIMERA EDAD, INFANCIA TEMPRANA, EDAD PREESCOLAR Y TRANSICIÓN; cada una de ellas caracterizada por el tipo de relación que el niño establece consigo mismo, con los demás y con el mundo que los rodea. Este sistema de relaciones al interior del cual pueden ubicarse los procesos psicológicos, define una actitud del niño frente al mundo, unas necesidades e intereses particulares así como unas formas de actuar y de sentir propias del niño en cada etapa.
Al organizar la escala por etapas se espera apreciar la COHERENCIA o ARMONÍA INTERNA, existente en su interior; esto es, la relación e interdependencia entre los cambios propios de cada etapa. Así mismo, se espera hacer evidente el salto o cambio cualitativo que hay entre una etapa y otra.
La complejidad y continuidad del proceso de desarrollo impide que éste pueda ser captado en su totalidad y de manera inmediata; por ello es indispensable “descomponerlo” a través de un proceso de análisis y traducirlo a aspecto observables.  Sin embargo, vale la pena recordar que el desarrollo no se reduce a la sumatoria de elementos ni al plano del comportamiento, pues al referirse, como concepto clave, a un funcionamiento psicológico que sufre cambios cualitativos. Se reconoce la existencia de leyes de totalidad que dan una organización al comportamiento.
Para nuestro caso, además de las etapas, se seleccionaron  NUEVE PROCESOS psicológicos fundamentales referidos a la relación del niño con los demás, consigo mismo y con el mundo que lo rodea; cada uno de los procesos da cuenta de dimensiones distintas del desarrollo del niño que al ser tomadas en su conjunto permiten decir algo sobre la totalidad del proceso.[3]
Con base en los anteriores criterios se formularon doce INDICADORES organizados en cuatro etapas, con las cuales hemos caracterizado el desarrollo infantil. Al interior de cada etapa, los indicadores se presentan en tres niveles de complejidad. De esta manera, si un indicador es tomado a través de todas las etapas, puede observarse la progresiva complejización de la actividad psicológica del niño en esa dimensión.

Para la elaboración de los indicadores se tuvieron en cuenta los siguientes criterios:
Consistencia con la conceptualización del desarrollo asumida por el ICBF.
La secuencia  evolutiva al interior de cada uno de los procesos psicológicos, esto es, los niveles de complejidad creciente.
Para evaluar el desarrollo según las particularidades de los contextos específicos y lograr indicadores sensibles a las diferencias de los medios socioeconómicos y culturales, se formularon los indicadores en situaciones generales, sin particularizar la conducta.
La formulación privilegia la continuidad teóricoexplicativa de la secuencia en cada uno de los procesos o dimensiones psicológicas, aún cuando se diera discontinuidad descriptiva, es decir, rupturas en los comportamientos escogidos.
La coherencia interna relativa de cada etapa, reflejada en la independencia de los indicadores que le corresponden.

Procesos Psicológicos
Es importante señalar que el eje conceptual que articula el ordenamiento del desarrollo infantil es el sistema de relaciones que el niño construye con la realidad y, dentro de dicho sistema, los procesos psicológicos implicados.
 Tal como fue planteado, la Escala evalúa doce dimensiones del desarrollo infantil a lo largo de cuatro etapas (primera edad, infancia temprana, edad preescolar, transición), señalando los indicios y su progresiva complejización. Los procesos seleccionados y los indicadores que le representan no pretenden cubrir todas las dimensiones psicológicas; sin embargo, posibilitan la valoración del estado de desarrollo en los tres sistemas de relación del niño con la realidad en diferentes momentos evolutivos.
-          RELACION CON LOS DEMAS
Hace referencia a aquellos procesos psicológicos que le permiten al niño construir, comprender y apropiarse el mundo social, en dos sentidos: uno, la relación con el otro como persona, en una relación yo – tú, desde las formas más incipientes hasta las más consolidadas de reconocimiento, empatía y sociabilidad hacia otro ser humano. El otro sentido concierne a la integración progresiva del niño a la vida colectiva y a la normatividad social.
En la conformación de la relación del niño con los demás, se resaltan tres procesos psicológicos que evolucionan a lo largo del desarrollo infantil: la comunicación, la capacidad interactiva y la construcción de la norma.
En el proceso de la COMUNICACIÓN se plantean dos dimensiones: la que se refiere a la construcción y al dominio progresivo de los códigos lingüísticos verbales;  desarrollo del lenguaje compresivo, expresivo y apropiación de las reglas gramaticales, fonéticas y sus usos del lenguaje.  La segunda es la comunicación a través de formas representativas no verbales, que parten del acto gestual, pasan por diferentes expresiones gráficas y llegan hasta los inicios de la escritura alfabética.
Los procesos de INTEGRACIÓN o capacidad interactiva se define en dos dimensiones: una que comprende los comportamientos que van de la total dependencia del adulto, hasta el logro de la capacidad de actuar por sí solo.
 La segunda dimensión hace referencia al proceso de integración con los iguales, que se expresa en comportamientos de cooperación, desde sus primeras manifestaciones de reacción y participación a las iniciativas del otro, hasta la aceptación de las reglas y normas del grupo infantil.

El proceso de CONSTRUCCION DE NORMAS va desde las primeras formas de adaptación al medio familiar, hacia el reconocimiento de una normatividad social externa ante la cual se construye progresivamente la autonomía.

-          RELACIÓN CONSIGO MISMO
Comprende aquellos procesos psicológicos que posibilitan la construcción del niño como individuo diferenciado de las otras personas, con subjetividad propia, producto de una identidad personal y social.  En este sistema de relaciones se integran tres procesos psicológicos: la identidad, la autoestima y el manejo corporal.
El proceso de IDENTIDAD, se refiere a dos dimensiones: una que concierne a la construcción progresiva de vínculos con otras personas, iniciando con el apego a adultos familiares hasta lograr los conocimientos básicos sobre identidad social.  La segunda, se refiere a la construcción de la individualización y de la identidad de género a través del reconocimiento de sentimientos y emociones en sí mismo y en el otro, así como de las diferencias sociales y biológicas entre los sexos.

La AUTOESTIMA concierne a procesos psicológicos relacionados con la valoración de sí mismo y de la propia capacidad a partir de las vivencias del placer-displacer, satisfacción de necesidades y del reconocimiento por parte de otros.

El MANEJO CORPORAL se refiere a los procesos afectivos y cognoscitivos relacionados con la progresiva integración de vivencias de goce, representación y dominio del movimiento propio, hasta llegar a la estructuración del esquema corporal.

-          RELACIÓN CON EL MUNDO QUE LO RODEA:
Aquí son relevantes los procesos ligados a la compresión e interiorización por parte del niño, de la existencia de una realidad externa, conformada por objetos y fenómenos físicos y sociales, tal cual puede ordenarse a partir de leyes y principios.  Esta compresión involucra la capacidad de exploración y explicación de lo real así como la construcción de los instrumentos cognitivos necesarios para conocer y comprender el mundo externo.  Igualmente, implica el aspecto afectivo que moviliza y motiva al niño a conocer y a aprehender la realidad.
La relación del niño con el mundo que lo rodea hace referencia a tres procesos psicológicos: el interés y conocimiento de los objetos, la comprensión de las relaciones causales y la representación  de la realidad social (relaciones e instituciones).
-          EL INTERES Y CONOCIMIENTO DE LOS OBJETOS da cuenta de los procesos de construcción de la permanencia (conservación) del objeto, del uso simbólico y del desarrollo del pensamiento categorial (construcción de los primeros conceptos).

-          La comprensión de las RELACIONES CASUALES comprende los procesos que partiendo de formas incipientes de manejo de la relación causa-afecto-agente (precasualidad), llegan hasta la construcción y comprensión de las explicaciones objetivas de esta relación.

-          La representación de la REALIDAD SOCIAL involucra procesos de construcción progresiva de relaciones sociales a partir de vivencias y representaciones incipientes de los comportamientos, organizaciones e instituciones que rigen las relaciones entre individuos y los grupos (familia, escuela, gobierno, barrio, etc.)



 ESCALA DE VALORACIÓN PSICOLOGICA

DATOS PERSONALES
Nombres:                                                          Edad:
Nivel de escolaridad:                                       Talla:                     Peso:
Descripción del Contexto Familiar: (Con quienes vive, quien se encarga de reforzar normas,  cuantos hermanos tiene, qué lugar ocupa…)

RELACIONES
PROCESOS
DIMENSIONES
Relación con los demás
Comunicación
-          Verbal
-          No verbal
Interacción
(Yo – Tu)
-          Dependencia/ Independencia
-          Cooperación entre iguales
Construcción de normas
-          Normatividad adulta/ Autonomía
Relación consigo mismo
Identidad
-          Identidad personal
-          Social
-          Identidad de género
Autoestima
-          Valoración de sí mismo
Manejo corporal
-          Vivencia y representación esquema corporal
Relación con el mundo
Interés por los objetos
-          Construcción noción de objeto / conceptos
Relaciones causales
-          Construcción noción de causalidad

Representación de la realidad social
-          Construcción del conocimiento social

Descripción del contexto Escolar:________________________________________
Psicoobservador(a):___________________________________________________


[1] ICBF – D.P.P, El desarrollo Infantil: una conceptualización desde el ICBF, Bogotá. 1990

[2] El concepto de funcionamientos psicológicos, oposición a la idea de conductas como unidades que pueden aislarse, es compartido por la mayoría de Psicólogos del desarrollo aún cuando su formulación mas pura es Piagetiana.
[3] Más adelante se presenta una definición e estos procesos así como de las Dimensiones del Desarrollo a los cuales se refieren: también se incluye un cuadro sinóptico que muestra los aspectos que serán evaluados.

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